domingo, 23 de noviembre de 2008

Histórico: a la Expropiación de Aerolíneas, España contesta ganando la Copa Davis



Frío Polar: Fue el que sintieron en el pecho los jugadores y aficionados argentinos en el estadio

“Este triunfo inesperado e histórico compensa con creces la pérdida de AA. Podéis no pagar un duro a Marsans, quedaros con Aerolíneas, que la Ensaladera se vine para España, que joder” comentaron eufóricos un grupo de funcionarios del gobierno español luego de observar por TV la hazaña del equipo español, que batió al gélido elenco argentino, favorito para la final.

Todavía no podemos creer que con un equipo tan paupérrimo hayamos vencido a los argentinos en su casa y en la superficie que ellos eligieron”, agregaron los funcionarios, antes de irse a los festejos en la Cibeles.

En Mar del Plata, ánimos caldeados. En los accesos al estadio, tumultos entre el personal de seguridad y grupos de gente humilde provenientes de los barrios periféricos y marginales de la ciudad que pretendieron ingresar para ver a sus ídolos. Llevaban una bandera con la leyenda “Copa Davis:¿evento popular de masas o negocio para pocos?” y no ocultaron sus preferencias: algunos tenían pequeños carteles con la inscripción “Nadal peronista de verdad, Nalbandian kirchnerista de ocasión”.

Se les denegó la entrada por carecer de tickets y porque se adujo que “el tenis es un deporte de elite y el negocio que subyace a él, también”.




Efectos colaterales de la Davis. Scioli, teléfono.

Análisis de la Serie:

Los periodistas y el público, consternados. “El nivel de amargura exhibido por estos jugadores es lamentable. Si venía Nadal se nos cagaba de risa en la cara”, fue una de las reflexiones escuchadas en la sala de prensa. 

Sin duda, se trata de un fracaso estrepitoso sin atenuantes: Argentina presentó su mejor equipo; los españoles vinieron emparchados, sin Nadal, Robredo, Moyá y Ferrero. Nos ganaron con dos jugadores mentalmente volátiles y de segunda línea como Verdasco y Feliciano López, y con un top ten en caída libre como Ferrer. 

A los españoles les sobró garra y concentración, a los argentinos les sobró miedo, abulia y frío.

 Cuadro de Honor:

 Los Ganadores:

Los jugadores españoles y su capitán, Emilio Sánchez: Emilio demostró que la viveza criolla no es sólo argentina: diplomático y simpático, metió presión a los argentinos con declaraciones inteligentes y mantuvo por las nubes el ánimo de Verdasco y López, jugadores habitualmente “flojos de la cabeza”.

Daniel Scioli, Fernando Marín, la Asociación Argentina de Tenis y los Sponsors: Porque montaron el negocio deportivo del año, y todavía están contando billetes. Grossos.

Los Perdedores:

 Los jugadores argentinos: desastrosos desde todo punto de vista. Nalbandian, mostrando lo peor de su repertorio dentro y fuera de la cancha: irrespetuoso con el periodismo, conflictivo con sus compañeros de equipo (agarrada con Calleri después del dobles) y confirmando que lo suyo no es la caballerosidad deportiva: en las buenas habla, en las malas se borra de las conferencias de prensa. El típico mal perdedor. Penoso.

Del Potro prefirió ir a Shanghai para ganar unos euros más en vez de cuidar el físico, y además del trajín deportivo, sumó el trajín sexual al que lo sometió Luciana Salazar en los días previos a la final.

El público argentino: Todavía no sabemos si fueron a un velorio o al máximo evento deportivo de la historia del tenis. No alentaron, quizás contagiados por la amargura que venía desde la cancha. Cuando decidieron hacerse oír, fue para hostigar e insultar a los jugadores españoles, a riesgo de que el equipo nacional sea penalizado con la quita de puntos o la pérdida del partido. Con los insultos a Verdasco lograron lo imposible: agrandar a un jugador discreto. Un desubique mayúsculo coronado por el lamentable “a estos putos les tenemos que ganar”. Tristísimo.

Los boludos que pagaron precios siderales  por una entrada, y en la reventa.

Los Errores: Luli Mancini no suele errarle, pero acá pifió feo: Nalbandian debió ser designado primer singlista del equipo, más allá del ranking. De haber hecho eso, el viernes era Del Potro-Ferrer y Nalbandian-López, y las chances de 2-0 ese día, mucho mayores. Inexplicable: la no inclusión de Willy Cañas en el equipo.

Los Mufas: Daniel Scioli, Guillermo Coria, Luciana Salazar, Jessica Cirio y Flavio Palmiero. 

El gobernador  fue en su calidad de garante del negocio; el “Mago” como flamante comentarista de TyC Sports junto a los insufribles Bonadeo y Klappenbach; las chicas, para abastecer sexualmente a los jugadores locales, de reconocido paladar gatero. Ninguno había estado en las anteriores series. Ni siquiera habituales seguidores como Gaby sabatini y la modelo y evasora de impuestos Valeria Mazza pudieron contrarrestar el “yetismo” emanado de estos personajes. Que no vayan nunca más.

 Domingo triste, solitario y final para el tenis argentino.

 Aerolíneas es nuestra, la Copa, hazaña de por medio,  de ellos.

 En este deporte, y en la Davis, el tren pasa una vez.